Mi padre decía que para comer sólo hacen falta dos cosas: tener hambre y comida.
Esta reducción simplista se entiende por los tiempos que le tocó vivir pero hoy no podemos prescindir de ponerle más calificativos al término comida: apetecible, sabrosa, saludable, variada, etc. etc.
Debo reconocer que la cocina nunca ha sido una de mis grandes aficiones. Me refiero a cocinar porque comer cosas ricas, eso siempre me ha gustado.
Las circunstancias de la vida propiciaron que no tuviera que dedicarme a ello pues cuando dejé la casa de los padres, la que fue mi esposa se convirtió en una muy buena cocinera. Por eso nunca necesité meterme en la cocina y las contadas veces que lo hice fueron un rotundo fracaso.
Cuando empecé a vivir sólo, hace 10 años, pensé que no necesitaba cocinar pues seguiría comiendo el menú de cualquier restaurante próximo a mi trabajo y para las cenas y fines de semana los platos preparados eran mi mejor recurso.
Sin embargo la familia y los amigos me insistían para que cocinara, que era mucho más saludable. Además siempre añadían COCINAR ES FACIL.
La verdad es que con el tiempo me cansé de los platos preparados y de la comida de los restaurantes y me dije. ¿Por qué no? Voy a aprender a cocinar, si todo el mundo dice que COCINAR ES FACIL.
Así que manos a la obra. Me compré una olla Super rápida, la revista Cocina Fácil y me puse a buscar recetas en internet que se adaptaran a mis gustos.
Lo primero que descubrí es que en las recetas de cocina hay palabras que no significan lo que tú crees y otras que directamente no sabes lo que es. Así que es importante aprender primero el vocabulario de cocina y conocer el significado de palabras como caramelizar, brasear, blanquear, papillote, desglasar, desleir, pochar, asustar, reducir, juliana, fumet, pellizco etc. Por eso concluí que es mejor leer la receta el día anterior para evitar sorpresas y preparar los ingredientes con antelación. PERO COCINAR ES FACIL
Con el nombre de algunos ingredientes también hay que tener cuidado, pues a veces un mismo alimento se le llama de distintas formas y no lo encuentras en el super. A mí me ha pasado con el sésamo, el jarrete, la berza y con los huesos para caldo que todavía no consigo hacer coincidir los que encuentro en el super y los que me ponen en las recetas. PERO COCINAR ES FACIL.
Otra cosa que hay que tener en cuenta es que hay recetas de mala calidad pues en algunas la cantidad y peso de los ingredientes no están debidamente proporcionados. Todavía recuerdo cuando quise hacer un puchero y no me cabían en la olla la cantidad de ingredientes que me indicaba la receta. ¿Y ahora qué hago? ¿Qué dejo fuera? ¿O tengo que volver a sacar todo e ir echando la mitad de cada cosa? Lo que hice fue romper la receta y marcarla como indeseable. También pasa que algunas recetas son tan largas y dan tantas explicaciones que se olvidan de explicar paso a paso el orden de ejecución. Para los que ya tenemos déficit de memoria y necesitamos leer lo siguiente después de cada paso, las explicaciones excesivas intercaladas son un obstáculo. Pero COCINAR ES FACIL.
Otra cuestión que es importante son la intensidad del fuego y el tratamiento dentro de la sartén o cacerola. Son aspectos que en muchas recetas no se explican o se explican de forma ambigua y no es fácil acertar. Cuando te dicen que le des la vuelta cuando ya esté hecho y tú no sabes si ya está hecho, tienes un problema. Cuando te dicen que añadas algo, si te lo pide el plato, tienes un problema porque no sabes cuando el plato te pide. Cuando te dicen que pruebes y rectifiques de sal y pruebas y está salado y no te dicen como rectificar, tienes un problema. PERO COCINAR ES FACIL.
Para facilitar las cosas todas las recetas te indican los tiempos de elaboración en cada paso pero tampoco te puedes fiar. Son tiempos aproximados, porque influye el nivel del fuego, la calidad y frescura del alimento, etc. Así que si ves que se está quemando y todavía le faltan 5 minutos según la receta, mejor lo apartas del fuego. Más tiempo de fuego no mejora el resultado. Que me lo digan a mí. Lo mejor es probarlo siempre antes. Claro que si eres como yo, que siempre he odiado la comida demasiado caliente, lo de probar no es un plato de gusto. Me cuesta averiguar el sabor de un plato con la lengua achicharrada. Pero COCINAR ES FACIL.
Y si al final te sobra o te falta algún ingrediente no te preocupes. Igual que cuando desarmas un aparato y al volverlo a armar te sobran piezas y si funciona no hay problema. Pues lo mismo cuando te sobre o te falte algún ingrediente si se puede comer el plato que has preparado no hay problema. Eso sí revisa la receta para comprobar donde está el fallo y que no te pase de nuevo. Yo me he encontrado bastantes recetas que te incluyen ingredientes y luego no te dicen cuando usarlos.
Por eso concluyo que para ser un buen cocinero o cocinera se necesitan cualidades, conocimiento y experiencia.
Pero no hay que desanimarse. COCINAR ES FACIL
Jajajajaja cuanta razon tienes y que bien lo cuentas. Vuelvo a ver ese tío que tanta gracia me hacia cuando era pequeña, en tantos y tantos momentos compartidos (ahora de adultos…las conversaciones son menos «condimentadas» 😉 )
Pero cuanta razón tienes tío, me he visto reflejada en varias ocasiones. Anoto como propuesta para aprender a cocinar, tirar de una buena cocinera, véase «mama». Para que te fijes en la tuya, no estas a tiempo, pero te presto la mia. Yo anoto sus recetas: ingredientes y tiempos, e incluso, alguna vez, la he grabado en vídeo. Y, aunque usa algunos términos que describes poco concretos y algo subjetivos como «cuando esté » «echa un chorrito de aceite» y alguno más, siempre puedes pedir que te concrete, a diferencia de las recetas.
Pero, pese a lo que cuentas, estoy segura de que estas hecho un cocinillas, aunque no llegues a chef.
Si, Mari Paz, tu madre es buena cocinera. Ya tengo alguna receta y consejos que me ha dado. Me alegra que te guste lo que escribo.
Me ha encantado!!! Pero para mi lo más importante es cocinar tranquilamente, sin prisa y ponerle mucho amor. Es fundamental para que salga rico.
Tienes razón Susana. Una vez leí que el ingrediente más importante y que no podía faltar nunca es la paciencia.
Estás hecho un cocinillas Rafa. La próxima visita a Donosti te nombro cocinero oficial cuando vayamos a la sociedad.
Da gusto leerte, que bien lo cuentas todo. Sigue así.
Zorionak
Gracias Garmendia. A ver si acaba ésto de una vez y podemos volver a hacer algún viaje juntos. Un abrazo.
Pues sí Rafa, yo que al igual que tú, durante muchos años mis mayores logros en la cocina han sido hacer los bocadillos de jamón y queso con tomate (eso sí, estaban de muerte), cuando me vi en la necesidad de cocinar, pensé que nunca es tarde para empezar. Y bueno, a mí nunca me sobran ingredientes, de hecho cuando me falta alguno de los que dice la receta, busco otra sobre el mismo plato pero que no lleva exactamente los mismos. Hay veces que el resultado es una mezcla de 3 ó 4 recetas. La cocina dicen que tiene que ser creativa, no? Hay incluso quien dice que tengo mano para la cocina.
Yo casi siempre me he podido comer lo que cocino, que ya es algo.
Pero sí. como tú dices: COCINAR ES FÁCIL (a pesar de todo)
Pues si. Cocinar es fácil. Cocinar bien es otra cosa.
A mi es que me gustan mucho los bocadillos. Jajaja.
Sigues siendo un héroe. Me gusta como lo cuentas.