Desde que Levi Hutchins, relojero norteamericano, inventó el despertador en 1787 ha llovido mucho. Hasta entonces la luz del sol o el gallo madrugador eran el método más usado para pasar del dulce sueño a la dura realidad.
Ahora simplemente con decir buenas noches los altavoces inteligentes te dicen el tiempo, te recuerdan tu agenda, te preguntan a qué hora quieres que te despierten y te desean buenas noches.
Recuerdo cuando era niño que en mi casa para despertar por la mañana había un reloj con una potente campana. Todas las noches era el mismo ritual; mi padre le daba cuerda al reloj y actualizaba, si era necesario, la hora a la que debía sonar. Por la mañana el ruido infernal de la campana sonaba de forma interminable y mi padre no lo paraba hasta que se levantaban los que tenían que ir a trabajar. (Si no me crees que el sonido era infernal visualiza el video y verás y oirás que no miento).
Cuando llegaron los primeros despertadores a pilas, el reloj fue quedando en desuso y se quedó como un elemento más de decoración en aquel mueble lleno de fotos y de recuerdos.
Con el paso del tiempo mi odio al reloj se transformó en apego y recuerdo que le dije a mi madre que no se desprendiera del reloj, que lo quería para mí y que era la única herencia que deseaba. Mi madre me contó que ese reloj fue un regalo de su padrino Enrique Campos que lo había montado en 1925 y con los datos que me dio escribí una nota que pegué en la base del reloj. Cuando me fui de casa mis padres me entregaron el reloj y todavía permanece expuesto en un rincón de mi casa.
El otro día me fijé en el reloj y al levantarlo descubrí la nota que tenía pegada en la base y que ya no recordaba, la despegué, la desdoblé y al leerla me vinieron estos recuerdos que he relatado y pensé, como decían nuestros mayores “Cómo cambian los tiempos”
Anda el reloj de la campana!!.yo sabia que te gustaba y que lo habías pedido de herencia. Lo que no sabia era porq te gustaba
Como decía mamá a mi me gustaba todo lo viejo. Será por eso. Ahora ya las cosas viejas me gustan menos, jajaja.
El Reloj. Sí, nos hace volver la mirada atrás.
Yy si cualquier tiempo pasado fue mejor, debe ser sólo porque éramos más jóvenes.
Pepe.